Tuesday, December 4, 2007

Sicario

Sicario

Sicario es el asesino que mata por encargo o contrato. Los sicarios incluso recurrían al asesinato para obtener su objetivo. Debajo de sus capotes encubrían la sicae, o daga pequeña, por la cual recibieron su nombre. En las asambleas populares, particularmente durante el peregrinaje al templo, apuñalaban a sus enemigos (romanos o simpatizantes romanos), lamentándose ostensiblemente después del hecho para escapar de la detención. Literalmente, Sicarii significaba "hombre-daga".


Contenidos
1 Etimología
2 Víctimas
3 Rebelión judía
4 Judas Iscariote

Etimología

Si carii (plural latino de Sicarius, de la "daga" o un asesino de contrato o encargo) es un término aplicado, en las décadas anteriores a la destrucción de Jerusalén en el 70 d.C, a los defensores judíos, (o a los insurrectos) que procuraron expeler a los Romanos y a sus partidarios de Judea:"Cuando Albinus alcanzó la ciudad de Jerusalén, dobló cada esfuerzo e hizo cada disposición de asegurar paz en la tierra exterminando la mayor parte del Sicarii." - Flavio Josefo, antigüedades judías ( xx.208)


Víctimas

Las víctimas del Sicarii incluyeron a Jonatán el supremo sacerdote, aunque es posible que su asesinato haya sido orquestado por el gobernador romano Félix. Algunos asesinatos eran llevados a cabo como venganza contra los romanos por parte de la población judía entera del país. En algunas ocasiones, podían ser sobornados para que no mataran a sus víctimas previstas. Si la narrativa de Barabás no es una invención para crear una parábola, incluso Sicarios condenados eran en ocasiones liberados si prometían no matar a sus opositores, aunque no hay evidencia para esta práctica fuera de los evangelios, que concuerdan en gran parte en este punto. Una vez, cuenta Flavio Josefo, después de secuestrar al secretario de Eleazar, gobernador de los recintos del templo, los sicarios llegaron a un acuerdo para liberarlo a cambio de diez de sus camaradas capturados.


Rebelión judía

Al principio de la rebelión judía (66), Sicarios, con la ayuda de otros zelotas, entraron en Jerusalén y cometieron una serie de atrocidades, para forzar a la población a luchar. En una relato del Talmud destruyeron el suministro de alimentos de la ciudad para forzar a la gente a luchar contra el sitio romano en vez de negociar la paz. Sus líderes, incluyendo Menahem ben Jair, Eleazar ben Jair, y Bar Giora, eran figuras importantes en la guerra, y Eleazar ben Jair finalmente logró escapar al ataque romano. Junto a un pequeño grupo de seguidores, se abrió camino hasta la fortaleza abandonada de Masada, donde siguió con la resistencia contra los romanos hasta 73, año en que los romanos tomaron la fortaleza y descubrieron que la mayoría de sus defensores habían preferido suicidarse antes que rendirse.

En el libro "La Guerra Judía" (VII) de Flavio Josefo', tras la caída del templo en el 70, los sicarios se convirtieron el partido judío revolucionario dominante, disperso en el exterior. Flavio los asocia particularmente con el suicidio en masa en Masada en 73 y el subsiguiente rechazo "a someterse al censo de impuestos cuando Cyrenius fue enviado a Judea a levantar uno" (José) como parte de su estrategia religiosa y política como luchadores de la resistencia:

"Algunas de las facciones de los Sicarion...no contentos con haberse salvado, volvieron a embarcarse en una nueva intriga revolucionaria, persuadiendo a aquellos que los recibían allí a reafirmar su libertad, a no valorar a los romanos como mejores que ellos mismos y a considerar a Dios su único Amo y Señor" (citado por Eisenman, p 180).


Judas Iscariote

En el nombre de Judas Iscariote, el apóstol que traicionó a Jesus, el epíteto "Iscariote" es interpretado por la mayoría de los eruditos como una transformación helenizante de sicario. El sufijo "-ote" denota membresía o pertenencia a - en este caso a los sicarios. Este significado se pierde cuando los Evangelios son traducidos a hebreo moderno: Judas es traducido como "Ish-Kerayot", convirtiéndolo en un hombre de los suburbios de la ciudad. Robert Eisenman presenta la visión general de historiadores seculares (Eisenman pag 179) al identificarlo en cambio como "Judas el Sicario". La mayoría de las consonantes y vocales coinciden con Flavio, Sicarioi/Sicariōn; en el Nuevo Testamento Iscariote. (Eisenman 1997 pp 179 etc)